"Entonces le hablo en un lenguaje que nunca ha escuchado, le hablo en español, en la lengua de los versos largos y crepusculares de Díaz Casanueva, en ese idioma en el que Joaquín Edwards nacionalismo predica. Mi discurso es profundo, hablo con elocuencia y seducción, mis palabras, más que de mí, cuestión de las noches cálidas, de las noches solitarias muchos en el Mar Rojo, y cuando la pequeña bailarina pone su brazo alrededor de mi cuello, yo entiendo que ella entiende. Idioma Magnífico! "
- Pablo Neruda, pasiones e impresiones
